4.11.19

Para no dormir


Si prometo la belleza en
la base de tus piernas
que muestran un filo solo
de navaja oculta. Niebla

para no dormir. Estuve
mil años escribiendo en
tu mejilla, tus llamadas
cerca, incomprensión desaten.

Nada rima solo gozan
de decirnos más verdades,
para salir a besarnos
con aterrizajes suaves

Yemen, Marbella, Tokyo
toda guardiana cuida su
estrella, religión, prosa
de quien nunca será nada

Aqui estoy sin importar tus
centinelas de pacos merca
ni tu carne inresurrecta
muerta para siempre está

en el alféizar de la gárgola.



9.1.19

El perro

Estoy en una ciudad, donde la voz del pueblo es de un armonía ausente
Es una armonía, indetectable. Es un grito del silencio.
Es música estruendosa y es música al fin. En cada personita, hablan muchas voces, se escuchan gritos de recuerdos de infancia, se ansían orgasmos, se buscan en Marx o en Bretón. Se piensa en el cantante de mala fama, en el intendente, y se baila cumbia. Se piensa en Pappo, y en el polvo blanco que llaman la gilada y se escucha Rock. Alguno sabrá de Mandela. Todes están recitándose algún mantra para sí mismos.
Hacia afuera, no hay novedades. Yo, soy sólo una nota más.

Estoy también en mi propia matria o patria. Didetronix.
Los perros de tres cabezas forman parte de su mitología
Hace referencia a la tríada. Mujer, fantasìa, perro.
La mujer, como representante de la vida
La fantasìa como representante de lo imaginario.
El perro. La permanencia, lo eterno, el sostèn. También el guardian

En Didetronix, estamos buscando la salida del software en que fuimos creados, esta rodeada por fronteras que sabemos inexistentes, pero aún así, nos limitan. Soy el único héroe o antihéroe de este reino encantado.
Tomo impulso para volar, pero allì esta el perro de tres cabezas, en silencio, y a veces me muerde.
Mi unica estrategia hasta ahora, fue intentar fundir lo imaginario en lo real. Casi siempre sali destrozado.
Fui corajudo.

Pero....
Cuando estoy muy triste o muy feliz. no tengo ni patria ni matria, ni pertenencias. En verdad nunca las tuve.